Un total de 4.882 personas fueron detenidas en Ecuador durante los primeros 22 días de la declaración por parte del gobierno de Daniel Noboa de un “conflicto armado interno” contra el crimen organizado, de los cuales 237 fueron arrestados por presunto terrorismo.
La cifra se desprende de un balance gubernamental publicado este miércoles sobre las operaciones policiales y militares realizadas en el territorio nacional bajo este nuevo escenario, donde 22 bandas del crimen organizado fueron consideradas como grupos terroristas y “actores beligerantes no estatales”.
Las autoridades ecuatorianas también afirmaron que entre el 9 y el 31 de enero abatieron a seis presuntos miembros de estas bandas, mientras que dos policías fueron asesinados y otros 11 liberados de distintos secuestros ejecutados aparentemente por estas mafias.
Durante ese periodo se incautaron 1.602 armas de fuego, 2.182 armas blancas, 1.006 alimentadoras de armas, más de 85.400 balas y más de 9.019 explosivos. Las fuerzas del orden de Ecuador decomisaron 40,2 toneladas de drogas y más de 102 mil dólares en efectivo, y aprehendieron a 28 embarcaciones, entre ellas un semisumergible cargado con droga en el que se encontraban tres colombianos, ahora en prisión preventiva.
El “conflicto armado interno” fue declarado por el presidente Daniel Noboa el 9 de enero frente a una oleada de atentados y acciones violentas atribuidas al crimen organizado, que incluyeron el secuestro de policías, alertas de explosiones, vehículos incendiados, motines simultáneos en cárceles con unos 200 rehenes que lograron ser liberados y la toma de un canal de televisión por parte de un grupo armado.
Durante esos motines se fugaron cerca de 90 presos, entre ellos Fabricio Colón Pico, considerado uno de los cabecillas de la banda “Los Lobos” y señalado por planear un atentado contra la fiscal general, Diana Salazar. Antes de esos episodios había escapado José Adolfo Macías, más conocido como “Fito”, el líder de “Los Choneros”, una de las bandas más violentas del país.