El delantero emblema del seleccionado argentino Ángel Di María perfila como la gran apuesta de los campeones del mundo en el clásico del martes próximo en el Maracaná.
“Fideo” Di María, artífice de la victoria consagratoria en la Copa América 2021 en ese mismo escenario de Río de Janeiro, parte en posición privilegiada entre los posibles cambios que analiza el DT Lionel Scaloni.
El jugador del Benfica de Portugal comenzó desde el banco en la derrota con Uruguay, el jueves pasado, y sus antecendentes en los partidos de máxima importancia le aportan un hándicap para regresar al once inicial.
No sólo decidió aquella final del 11 de julio de 2021 en el Maracaná, también se anotó como goleador en la Finalissima ante Italia en Wembley y en la final con Francia en el Mundial de Qatar. Su campaña global con la “Albiceleste” arroja 135 encuentros, 29 tantos y misma cantidad de asistencias.
Su eventual incorporación en la formación titular de la Selección supone la salida del delantero de la Fiorentina Nicolás González, presente desde el inicio en los cinco partidos anteriores de la clasificación para Estados Unidos-Canadá-México 2026.
Scaloni mantiene el misterio en el búnker argentino
El plantel argentino volvió al trabajo en el predio Lionel Andrés Messi de Ezeiza, sin indicios en campo sobre el equipo que jugará ante Brasil, pero con esa idea primaria en la cabeza del cuerpo técnico.
Una segunda posibilidad, menos concreta, sería la inclusión de un cuarto mediocampista, siempre por Nico González, para reforzar un sector en el que Argentina resultó superado en el clásico rioplatense.
De inclinarse por esa chance, tres jugadores disputarán la titularidad: Leandro Paredes, más posicional; Exequiel Palacios, de mayor equilibrio, y Giovani Lo Celso, de característica más ofensiva.
De modo que la probable formación argentina sería con Emiliano Martínez; Nahuel Molina, Cristian Romero, Nicolás Otamendi y Nicolás Tagliafico; Rodrigo De Paul, Alexis Mac Allister y Enzo Fernández; Lionel Messi, Julián Álvarez y Di María.
Los campeones del mundo volverán al Maracaná desde aquella consagración continental en 2021 con el objetivo de aplicar a Brasil la primera derrota como local en toda la historia de las Eliminatorias.
Brasil necesita un triunfo
La “Canarinha” llega con urgencia de resultados, en un contexto atípico: acumula dos derrotas consecutivas en la competencia de la Conmebol y está al mando del entrenador del Fluminense, Fernando Diniz, quien de momento tiene carácter de interino.
Después de pasar 37 partidos sin derrotas en las Eliminatorias, Brasil perdió su invicto con el Uruguay de Marcelo Bielsa en Montevideo, en octubre pasado, y el jueves último cayó ante Colombia (2-1) en Barranquilla, luego de comenzar el partido en ventaja.
Para peor, perdió por lesión al delantero de Real Madrid Vinicius Júnior, quien representa su mejor jugador en ausencia del lesionado Neymar, quien podrá retornar a la canchas recién el año próximo.
Las bajas de los pentacampeones del mundo se cuentan con las dos manos ya que tampoco estarán disponibles otros jugadores de presencia estable en el anterior ciclo de Tite.
El arquero Ederson (Manchester City), los defensores Éder Militao (Real Madrid) y Danilo (Juventus); los mediocampistas Casemiro (Manchester United) y Lucas Paquetá (West Ham) y los atacantes Richarlison (Tottenham Hotspur) y Antony (Manchester United) no serán de la partida.
Argentina, líder de las Eliminatorias con 12 puntos, retomará su agenda este domingo con una nueva práctica desde las 10:30 en Ezeiza, a puertas cerradas.
El superclásico del fútbol sudamericano se disputará este martes desde las 21:30 con arbitraje del chileno Piero Maza.