El presidente electo, Javier Milei, tuvo este lunes su primer día de reuniones en los Estados Unidos acompañado por su probable ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, y el resto de la mesa chica de La Libertad Avanza, con el objetivo de aceitar contactos financieros en Wall Street para lograr abrir el grifo de la deuda, además de los encuentros con autoridades norteamericanas y del Fondo Monetario Internacional.
El primer destino de la minigira de Milei fue Nueva York, en donde visitó la tumba del rabino Menachem Mendel Schneerson, exlíder de una comunidad conservadora de nombre Jabad Lubavitch. Fue acompañado por su hermana Karina y Gerardo Werthein, posible embajador ante la Casa Blanca.
En paralelo, Caputo junto a Nicolás Posse y Santiago Caputo, el nuevo gurú de Milei, desplegaron la agenda económico-financiera. El plan, como no podría ser de otra manera, es “seducir” a los fondos internacionales para que apoyen el plan ultraneoliberal del presidente electo.
Si bien Argentina tiene el canal del crédito externo cerrado, oportunidades para los fondos externos no van a faltar: desde hacerse con empresas públicas a precio de ganga hasta asegurarse el acceso a una de las mayores reservas de gas natural del mundo, a través del control sobre YPF.
Plan seducción
Las ideas de Milei y Caputo son música para los oídos de los jerarcas de Wall Street, en donde cada punto de ajuste del gasto público en relación al PBI luce como una invitación a participar de una fiesta de la que van a disfrutar muy pocos. En su momento, Milei dijo que su intención era recortar el gasto 15 puntos del PBI, por lo cual no iba a tener ningún problema con el FMI, que no se atrevería a exigir tanto desangre. Ahora, ya cerca de la botonera, habrá que ver cuánto ajuste termina realizando. Caputo habla de 5 puntos del PBI, un número también muy importante.
Si bien todavía no hay confirmación oficial sobre el rol que tomará Caputo, Milei anticipó que “está claro que necesito a alguien que tenga una muñeca financiera experta para desarmar las bombas de las Leliqs, que es clave para evitar la híper y abrir el cepo. Dicho esto, creo que no hay persona más experta que Caputo”.
Uno de los puntos centrales de la agenda económica de corto plazo de Milei es el desarme del stock de las Letras de Liquidez (Leliq), una fuerte deuda en pesos que tiene el Banco Central y sobre la cual se apoyan los plazos fijos del público en los bancos. De acuerdo a los trascendidos, el nuevo equipo económico evalúo transferir esa deuda al Tesoro vía financiamiento con deuda externa, aunque eso requeriría una salida crediticia que el país no tiene. Encontrar solución a las Leliqs sería el paso previo a levantar las restricciones cambiarias.
Otra opción que se estaría evaluando para sustentar semejante operación de deuda externa es que los nuevos bonos estén asegurados por los activos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES y por el 51 por ciento accionario que posee el Estado en YPF.
“Mundo libre”
Milei también se reunió en Nueva York con el ex presidente Bill Clinton y Chris Dodd, enviado especial de Biden para América Latina. Como dijo Milei en campaña, La Libertad Avanza quiere ser el mejor aliado de los Estados Unidos, paladín del “mundo libre”. El objetivo es acercarse lo más posible a la administración demócrata de Joe Biden.
La agenda libertaria seguirá en Washington, en donde ya está confirmado el encuentro en la Casa Blanca con Jake Sullivan, consejero de Seguridad Nacional de Biden. La agenda de encuentros en la capital norteamericana contó con el apoyo clave del embajador en Argentina, Marc Stanley.
Por otro lado, Milei tendrá su primera reunión cara a cara con representantes del FMI. Es otro de los grandes frentes que tendrá el nuevo gobierno. El objetivo es que el organismo se entusiasme con el programa ultraneoliberal y aporte fondos frescos.