RACINE, Wisconsin, EE.UU. (AP) — Fuentes despreocupadas informan que los torpes esfuerzos del asesino de multitudes Danny Wilkins en un house show de la banda local de horror punk Root River Revenants causaron solo unas pocas bajas, con 23 de los 26 asistentes saliendo ilesos del espectáculo.
“En realidad fue un poco vergonzoso de ver”, dijo Kelly Long, fan de Revenants. “No quiero cagarme en el tipo, porque claramente está haciendo todo lo posible en todo esto, pero simplemente no parece que lo mejor sea muy bueno. Seguí viéndole lanzar puñetazos fuera del pozo, pero la mayoría de las veces simplemente fallaba. Ni siquiera me di cuenta de que el espectáculo estaba terminando al principio porque casi todos estaban de pie y ilesos. Quiero decir, Eli estaba sangrando bastante mal, pero estaba sangrando cuando entró, así que no creo que esté relacionado”.
La guitarrista de The Revenants, Lina “Headless” Horstmann, expresó su preocupación por el incidente.
“Lo realmente molesto de todo esto es que no estamos seguros de cómo contar la asistencia a ese espectáculo”, dijo Horstmann mientras se mordía una costra en la muñeca. “Teníamos 26 personas e íbamos a tener un gran anuncio porque nuestro antiguo récord era de 24, pero ¿se nos permite contar a los tres tipos que murieron? Simplemente no hay una guía clara sobre la etiqueta aquí. Y de todos modos, creo que dos de los tipos estaban muertos antes de que entraran las últimas personas, por lo que podría haber sido solo 24 personas allí a la vez. A veces es muy difícil navegar por estas cosas”.
El principal experto de la escena local en el asesinato de multitudes no se sorprendió por la letalidad limitada de Wilkins.
“Sí, Danny es un chico decente, pero nunca tiene ni puta idea de lo que está haciendo”, explicó Chris “Three-Eyes” Cheng. “Viene de Milwaukee, y siempre dice que es porque fue a la escuela aquí, pero honestamente creo que se hartaron de que él sacara este tipo de mierda a medias. Los Revenants son una mierda, y el sótano en el que juegan es enorme. Eso significaba que había un montón de espacio vacío, y nadie más se movía en absoluto. Era demasiado fácil alejarse del tipo agitando los brazos por todo el lugar. Danny realmente necesita entender que si quieres matar a una multitud, tiene que haber una multitud”.
En el momento de la publicación, Wilkins acordó ingresar a un programa combinado de terapia y entrenamiento para detener o mejorar su matanza de multitudes, llamado “Get Well or Get Good”.