El croata Ivo Rojnica, supuesto responsable de la mayor “cueva” de compraventa de dólares porteña, fue detenido este martes, junto a otro financista y un empresario, acusados de integrar sociedades dedicadas al lavado de activos provenientes del narcotráfico internacional, en el marco de 20 allanamientos en los que se secuestraron más de un millón de dólares y 50 millones de pesos, informaron fuentes judiciales y policiales.
Los detenidos quedaron a disposición del juez Federico Villena, a cargo del Juzgado Federal 1 de Lomas de Zamora, quien investigaba desde hace cinco años una causa por lavado desplegado en el país por el cártel mexicano de Sinaloa, entre otras organizaciones.
Una de las maniobras ilegales que se les imputa a los detenidos es lavar el dinero que fue ingresado al país para financiar la operación de narcotráfico conocida como “Bovinas Blancas”, descubierta en junio de 2017 en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, a raíz de la cual se secuestraron casi dos toneladas de cocaína que el cártel mexicano tenía previsto enviar a Europa en el interior de bobinas de acero.
Los voceros consultados aclararon a Télam que esta causa penal, en la que Rojnica fue apresado junto al empresario Federico Pulenta y al financista Agustín Estrada Palomeque, es independiente de la que se lleva adelante en los tribunales federales de Comodoro Py 2002, a cargo del juez Marcelo Martínez De Giorgi, y en la que el ciudadano croata está imputado por supuestas maniobras ilegales mediante la financiera Nimbus Group, situada en San Martín 140.
En ese expediente, se investiga si los negocios de Rojnica forman parte de una “operatoria trasnacional ilegal” que, por su volumen, tenía un importante rol en la formación del precio del “dólar blue”, según la principal hipótesis.
“El Croata” fue apresado este martes por la mañana en su domicilio del barrio cerrado “El Golf”, de Nordelta, uno de los 20 sitios allanados por personal del Departamento de Crimen Organizado de la Policía de la Ciudad y del Departamento Delitos Fiscales de la Policía Federal Argentina (PFA), con la asistencia de personal de la Aduana.
En tanto, el empresario Pulenta fue detenido en el barrio cerrado “El Encuentro”, de la localidad bonaerense de Benavídez, mientras que Estrada Palomeque fue apresado en su domicilio de Montevideo al 1800, en el barrio de Retiro.
Otro de los sitios allanados fue un domicilio en el cual, según los pesquisas, funcionaba una oficina satélite de la cueva de “El Croata”, situada en el tercer piso del edificio de Lavalle 472, donde se halló dinero en efectivo y armas, entre ellas cinco pistolas -tres Glock, una con mira láser; una Bersa calibre .22 y una Walter- y dos revólveres Smith & Wesson calibre .38 Special.
En tanto, en una caja de seguridad privada en la zona de Pilar, perteneciente al croata Rojnica, los investigadores secuestraron 980 mil dólares.
Fuentes judiciales aseguraron que el juez Villena contaba con más de 1700 discos rígidos con escuchas telefónicas, filmaciones y entrecruzamientos de información financiera, tanto nacional como internacional, con la que logró establecer el funcionamiento de la organizaciòn delictiva.
Un vocero con acceso a la investigación explicó a Télam que los tres detenidos aparecen en la causa conformando diversas sociedades dedicadas al movimiento de dinero que son investigadas desde hace más de cinco.
Una de las maniobras investigadas -entre otras muchas que conforman el expediente que lleva adelante el juez Villena e instruye la fiscal federal Cecilia Incardona- fue detectada en 2017 por la DEA (Drug Enforcement Administration) estadounidense, que alertó a las autoridades nacionales sobre una operación de narcotráfico financiada por el cártel de Sinaloa, que iba traficar cerca de dos toneladas de cocaína desde el puerto de la ciudad bonaerense de Campana rumbo al Barcelona, España, en bobinas de láminas de acero.
Se estableció entonces que para la logística de esa operación se ingresaron al país 500 mil dólares a través del operador de Bitcoins, Emanuel García -condenado en 2021 a 5 años de prisión-, quien los cambió por efectivo en una “cueva” relacionada con los ahora detenidos.
“Estas personas van constituyendo organizaciones que se dedican a sacar dinero al exterior. Al operar para una banda de dedicada al narcotráfico, esas operaciones pasan a violar la ley federal”, dijo uno de los pesquisas a esta agencia.
Y agregó: “Se trata de grupos financieros que ingresan y egresan dinero de manera ilegal a la Argentina. Así como fugan dólares, ingresan dólares y también operan para bandas narcocriminales que quieren sacar dinero al exterior o financiar operaciones en el país”.
Si bien esta investigación por el lavado de activos de los narcos comenzó en el 2017, en las últimas semanas, a raíz del allanamiento en la “cueva” que se le atribuye a “El Croata” dispuesta por el juez Martínez De Giorgi en la otra causa, se detectaron algunos movimientos y escuchas que derivaron en los procedimientos ordenadoseste martes por el juez Villena.
Por tal motivo, el ciudadano croata, que no estaba detenido en la otra causa por entender el juez que no existían riesgos procesales, ahora sí quedó preso a disposición de la Justicia Federal de Lomas de Zamora.
La operación “Bobinas blancas”, que desbarató la maniobra narcorciminal del cártel de Sinaloa en Argentina, se realizó el 18 de abril de 2017, luego de que la DEA aportó los nombres de la empresa exportadora, de la importadora y la dirección del depósito de Bahía Blanca donde se preparaba la droga, que fue allanado por orden del juez federal de Campana Adrián González Charvay, lo que derivó en siete detenciones y el secuestro de 1.376 kilos de cocaína en Bahía Blanca y otros 486 kilos en Luján de Perdriel, provincia de Mendoza.
Durante esa investigación, se logró determinar las responsabilidades de siete personas encargadas de llevar adelante la operación en Argentina, entre ellas tres de nacionalidad mexicana, quienes condenadas en septiembre de 2021 a penas de entre 5 y 15 años de prisión.