El panorama global del 2024 incluye a más de 70 países con elecciones y América Latina no es la excepción. El Salvador, México, Venezuela, República Dominicana, Panamá y Uruguay deberán escoger a sus nuevos líderes. ¿Podrá esta próxima ronda contrarrestar la tendencia antioficialista que marcó las votaciones de los últimos años en la región?
Los casos de México, Venezuela y El Salvador son testigos de contiendas electores que marcarán la agenda política de la región.
México elegirá a su primera presidenta
El 2 junio la exalcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum y la empresaria Xóchitl Gálvez disputarán la presidencia que, por primera vez en la historia del país, va a quedar en manos de una mujer.
Sheinbaum buscará seguir el proyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) por seis años más. Enfrente, Gálvez, del conservador frente opositor, plantea darle un giro completo a las políticas económicas y sociales de la izquierda en el poder.
“Gálvez se reconoce como descendiente de pueblos originarios, se viste con vestimentas tradicionales y en general ha levantado la bandera de los derechos de los pueblos originarios en México“, detalló a Página|12 Juan Negri, director de la carrera de Ciencias Políticas de la Universidad Di Tella. “Tenemos a dos candidatas, dos mujeres, una judía científica muy importante y otra originaria, es decir, hablan de una diversidad, de un país en el que en realidad la mayor parte de las veces ha sido gobernado por una élite política no muy conectada con estas minorías”, aclaró el analista.
A menos de seis meses de la contienda electoral, las encuestadoras anticipan un triunfo de la candidata de López Obrador, con un 41 por ciento, sobre la representante del Frente Por México (PAN, PRI, PRD) con un 35 por ciento. De igual forma, el porcentaje de indecisos es alto, arriba del 20 por ciento.
Temas cruciales como el tráfico de drogas, el crimen organizado y los desafíos migratorios hacia Estados Unidos serán los puntos neurálgicos de la agenda política de ambas candidatas en carrera hacia la presidencia.
Incógnita sobre el futuro de Maduro
Las próximas elecciones de Venezuela constituyen un capítulo crucial en el escenario político de ese país, ante la incertidumbre en torno a los candidatos. Aunque se presume que Nicolás Maduro buscará un tercer mandato, la atención se centra en los aspirantes de la oposición. En este contexto, surge la interrogante sobre la posible participación de María Corina Machado, tras haber sido inhabilitada por la Contraloría General.
“Hoy por hoy, con todos los lados oscuros que se le puedan encontrar, es Maria Corina Machado la figura de la oposición que parece en condiciones de unir el voto opositor. La cuestion es ver si va a poder competir”, sostuvo el analista político Claudio Fantini en diálogo con este medio.
En octubre de 2023, la Comisión Nacional de Primaria de Venezuela proclamó a Machado ganadora de las primarias opositoras para las elecciones de 2024, pero el triunfo se empañó cuando la Contraloría General de Venezuela emitió una declaración de inhabilitación impidiéndole presentarse a cargos públicos, por la omisión de pagos de bonos de alimentación en su declaración jurada de patrimonio.
Ahora, la atención se centra en la Suprema Corte, que asumirá el papel de árbitro para analizar el caso y emitir un veredicto sobre la viabilidad de su candidatura. Sin una fecha clara de cierre para la convocatoria a elecciones, a pesar del acuerdo firmado en octubre entre el oficialismo y la oposición para celebrar elecciones presidenciales en el segundo semestre de 2024, prevalece la incertidumbre.
Este episodio marca un giro en el panorama político venezolano, ya que la decisión final de la Suprema Corte podría tener repercusiones de largo alcance, dado que no solo determinará el futuro político de Machado, sino que arrojará luz sobre la estabilidad del proceso electoral en el país, en un momento en el que las expectativas y tensiones están en aumento.
Pese a su inhabilitación, Machado expresó optimismo en un mensaje de fin de año. “Llenos de esperanza y dispuestos a aprovechar la oportunidad real que tenemos (…) El 22 de octubre demostramos que Venezuela ya cambió, se cerró un ciclo político y social, dejamos atrás una vieja forma de hacer política. Las primarias son un mandato vivo que haremos cumplir. La liberación y la transformación de Venezuela a través de elecciones presidenciales libres y limpias en 2024 son el camino al cambio en paz”, expresó en un video en sus redes sociales.
Del otro lado, Maduro generó más incertumbre al decir que “no sabe” si será el candidato del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para 2024. “Yo lo que te puedo decir es que es prematuro todavía. Apenas empieza el año. Solo Dios sabe. Esperemos que se definan los escenarios electorales del proceso que va a haber este año, y estoy seguro de que, con la bendición de Dios, tomaremos la mejor decisión”, expresó, aunque enfatizando que el “pueblo venezolano” le dará una lección a los “imperios del mundo” con las votaciones.
“En esta decisión sobre mi eventual candidatura en 2024, nunca estará por delante ni las ambiciones personalistas, ni individualistas, ni ego ni sangre azul, estarán los intereses de la patria. Y cuando se tome la decisión, sea la que sea, saldremos todos a conquistar”, añadió el actual presidente.
Bukele va por un nuevo mandato
El Salvador irá a las urnas el 4 de febrero, en una contienda que tendrá nuevamente a Nayib Bukele como candidato, pese a los cuestionamientos de la oposición, que asegura que al menos cinco artículos de la Constitución le prohíben ir por un segundo mandato.
La Corte Suprema, de mayoría oficialista, estipuló que para evitar que un presidente que opte a la reelección no prevalezca en el cargo debe dejarlo seis meses antes de que inicie el nuevo período. Debido a eso, Bukele pidió una licencia desde el 30 de noviembre para dedicarse a la campaña electoral.
“En El Salvador el resultado parece cantado, Bukele allí parece invencible. Las dudas surgen sobre cómo va a sobrevivir el estado de derecho y la democracia en el país despues del forzamiento de la constitucionalidad y de la institucionalidad que implica esta nueva postulación del actual mandatario”, precisó Fantini.
Tras cuatro años en el cargo, Bukele va por su reelección con altos niveles de popularidad, principalmente en torno a sus políticas en materia de seguridad. Sin embargo, defensores de los derechos humanos en el país y en el extranjero cuestionan sus métodos porque consideran que violan los derechos humanos.
El presidente se enfrenta al candidato Manuel Flores, del izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), y a Joel Sánchez, de la conservadora Alianza Republicana Nacionalista (Arena), ambos con bajo nivel de popularidad entre los salvadoreños.
“Bukele es un líder autoritario que ha esmerilado la democracia salvadoreña, pero a la vez es inmensamente popular“, detalló Negri y agregó que “es comprensible que vuelva a ganar en un país que está atravesado por la violencia de las maras y donde la manera en que Bukele lidió con la violencia ha sido muy controversial, pero muy popular entre los salvadoreños”.
Uruguay, Panamá y República Dominicana eligen presidente
Uruguay tiene elecciones presidenciales el 27 de octubre. Si bien no hay confirmaciones aún sobre nombres, por el Partido Nacional tienen intencioness de participar de la contienda el actual Secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, y la economista Laura Raffo, quienes deberían enfrentarse en internas.
Del otro lado está la coalición izquierdista Frente Amplio, donde los principales candidatos son Yamandú Orsi, actual intendente de Canelones y Carolina Cosse, alcaldesa de Montevideo. Los últimos sondeos indican un leve porcentaje a favor del Frente Amplio, pero resta un largo camino hasta la decisión final.
En Panamá, la fecha para designar autoridades es el 5 de mayo. Entre los diez candidatos en carrera se encuentra el expresidente Ricardo Martinelli, dueño de la cadena de supermercados más importante del país y sentenciado a diez años de prisión por lavado de dinero. Martinelli es el favorito en las encuestas, con una plataforma que apunta al desarrollo empresarial y la seguridad. Enfrente tiene a otro expresidente, Martín Torrijos, y al actual Vicepresidente José Gabriel Carrizo.
En República Dominicana, en tanto, la votación será el 30 de junio. El presidente Luis Abinader, del Partido Revolucionario Moderno, anunció que será uno de los candidatos, y cuenta con, al menos, el 70% de aprobación. Bajo su liderazgo, la isla caribeña tuvo una de las tasas de crecimiento del PIB más altas de América Latina, según la CEPAL.
Abinader se enfrentará a un candidato que contará con el apoyo de tres grandes partidos de oposición: el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y Fuerza del Pueblo (FP). Los contendientes de la oposición incluyen al expresidente Leonel Fernández, de FP y Abel Martínez del PLD.