El dueño del bar “Zar Burgers & Beers” del partido bonaerense de San Miguel fue condenado a la pena de seis años de prisión y 10 de inhabilitación para ejercer actos de comercio por la muerte de Lucía Costa Osores, ocurrida en 2020 tras la explosión de un centro de mesa.
La sentencia fue dictada por el Juzgado en lo Correccional N°3 de San Martín, y se determinó que Carlos Eduardo Oliverio fue el autor responsable de los delitos de homicidio culposo y lesiones culposas leves y graves, así como también de violación al artículo 205 del Código Penal que se estableció por la pandemia de coronavirus.
Acerca de Marina de los Ángeles Ramírez, encargada del bar, el juzgado la absolvió de todos los cargos por los que fue imputada.
El veredicto se dio a conocer este viernes pasadas las 12 del mediodía en el canal de YouTube de la Suprema Corte Bonaerense. A pedido de la fiscalía y la querella, se dispuso la inmediata detención del dueño del bar, mientras que se libró de culpa y cargo a la encargada.
Priscila Lucca, la moza que encendió el centro de mesa, será juzgada en otro juicio, ya que frente al Tribunal volvió a ratificar que no está en condiciones psiquiátricas para declarar. De esta manera, a fines de octubre y para que no se suspenda por segunda vez el juicio, los jueces decidieron que la joven sea juzgada en otro debate bajo la misma imputación. Ese juicio se realizará en 2024 ya que el resultado de los peritajes psicológicos estarán en diciembre próximo.
Durante los alegatos, la fiscalía pidió siete años de cárcel para los acusados al sumarle al homicidio y las lesiones, el incumplimiento del artículo 205 del Código Penal que se estableció durante la pandemia de coronavirus: “será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes para impedir la introducción o propagación de una epidemia”.
Antes de la lectura de sentencia, la familia de la joven convocó a una concentración en la puerta del Juzgado, ubicado en la avenida Ricardo Balbin 1753.