Lo que más gusta de la saga de John Wick Es el “gun-fu”, una coreografía de acción frenética pero pensada al detalle, un ingrediente esencial que El Continental, la serie spin-off de ese mundo online en Prime Video a partir del 22 de septiembre, la tiene presente y propone desde su episodio introductorio.
Lo único que falta en la nueva serie es Keanu Reeves-John Wick, aquí sustituido por un personaje que da vida a Ben Robson de Vikingos. Son los años 70 y Frankie, el asesino a sueldo que juega fuera de las reglas encarnadas por Robson, ha llegado al icónico propietario del hotel del nuevo espectáculo después de una estafa que salió mal seguida de un ballet explosivo tan familiar como frenético. Un choque muy fuerte que lo opone, solo y huyendo, a un flujo interminable de sicarios sin rostro. Esta es la libertad que un streamer puede permitirse: puede exagerar, incluso ser más visceral y sangriento (por ejemplo, con golpes rápidos en la cabeza señalados con copiosas bocanadas de niebla roja).
“Nuestro objetivo siempre ha sido encontrar nuestra voz”, dice la coordinadora de acrobacias Larnell Stovell sobre el estilo. Run’n’gun característica de la franquicia. “Queríamos que el proyecto fuera único, fresco, pero también visceral, arenoso. También queríamos reflejar la época, los años 70 cuando las técnicas [fisiche] No eran ya tan refinados”.
Antes de que el equipo de Stovell pueda comenzar a trabajar con los actores y hacer una secuencia, debes planificar todo con mucha anticipación. Para el prólogo, todo comenzó con él, el showrunner Kirk Ward y el director Albert Hughes (conocido por En la jungla de asfalto y Dólares sucios hecho con su hermano Allen) con la intención de estudiar el guión juntos y elaborar las necesidades de las escenas de acción. “Evaluamos los ejemplos disponibles y luego discutimos el estilo y el tono[que buscamos]”, explica.
En ese momento, el equipo de Stovell crea un borrador de la secuencia para comenzar a trabajar en la secuencia para mejorarla, lo que hacen en su propia “mini” copia del set, construida de acuerdo con las solicitudes específicas al equipo de producción. Un proceso que se repite para todas las escenas de acción: es una película de bajo presupuesto, construida en el suelo de un gimnasio con cajas, sofás y “lo que sea” está a mano. “Cuando creamos la coreografía, queremos asegurarnos de que funciona en el espacio que la albergará”, explica, antes de dar un ejemplo de las hipótesis que deben evaluarse (“¿Tendremos suficiente espacio para lanzar a alguien al otro lado de la habitación?”).