Inaugurado en octubre de 2012, el El Centro Cultural Elena Garro ocupa una casona de Coyoacán (conocida localmente como casona) que data de principios del siglo XX. Para expandir sus numerosas estanterías más allá del espacio que ofrece este edificio, el rediseño arquitectónico contemplaría un proyecto de extensión de hormigón y vidrio para permitir que los libros salgan de la casona y entren árboles. Los árboles más grandes de lo que solía ser el patio delantero se han incorporado a la carcasa moderna del centro cultural y crecen a través de aberturas en el piso y el techo.
Este audaz proyecto es obra de Fernanda Canales González, una de las arquitectas más reconocidas de México. Diseñado en conjunto con el estudio Arquitectura911, el trabajo de Canales es parte de una celebración de las mujeres creativas en el país. La escultora Paloma Torres participó en la creación de los llamativos patrones utilizados en las superficies de concreto expuestas de la construcción, junto con detalles adicionales. Por último, está la propia homónima del centro, la escritora Elena Garro.
Nacida en Puebla en 1916, Garro creció en Iguala. En 1937 se casó con Octavio Paz, a quien había conocido cuando ambos eran estudiantes en la Ciudad de México (hasta 2024, Paz es el único escritor mexicano que ha ganado un Premio Nobel de Literatura). Pasaron su luna de miel en España, en medio de la guerra civil de ese país. La experiencia llevó a Garro a escribir el poema “Recuerdos de España”, uno de sus primeros textos publicados. Durante su matrimonio, la carrera de Garro se centró en el periodismo y la investigación. Tras su separación en 1956, sus escritos se orientaron hacia la gran pantalla, ya que algunos de sus guiones se convirtieron en películas.
En 1968, un año lleno de acontecimientos debido a que la Ciudad de México fue sede de los Juegos Olímpicos de verano, las protestas estudiantiles previas y las reacciones letales del gobierno ante ellas, Garro abandonó el país en exilio voluntario. Su decisión de no comprometerse con los líderes estudiantiles de inspiración comunista la llevó a ser rechazada por muchos de sus compañeros. Pasó años en Estados Unidos, España y Francia antes de regresar a México en 1991. Para ese momento, su reputación en México había crecido y recibió homenajes y reconocimiento. Después de su muerte en 1998, su legado ha seguido siendo cimentado por entidades como este centro cultural, y algunos la consideran la escritora más importante de México desde Sor Juana.
Si bien gran parte del edificio está ocupado por la librería, las salas de la antigua casona ahora albergan otros eventos como talleres, charlas, presentaciones de música y teatro, además de otras propuestas culturales. La estructura moderna del edificio fue diseñada para estar separada de la casona, de modo que, en caso de necesidad, se pudiera separar y dejar la casona en su estado original.