En octubre, popularmente conocido como el mes rosa, las miradas giran en torno a la concientización y sensibilización del cáncer de mama. Especialistas en mastología hacen hincapié sobre una arista importante y pocas veces abordada: cáncer de mama y embarazo. ¿Es posible lidiar con una enfermedad oncológica siendo gestante?¿Cuáles son las contraindicaciones del tratamiento para una embarazada?¿Cuánto tiempo se recomienda esperar para concebir un hijo una vez superada la enfermedad?
“El tratamiento del cáncer de mama tiene el mismo enfoque que en una paciente no gestante, es decir cirugía, quimioterapia y radioterapia. Pero la secuencia va a depender de la semana de embarazo que cursa la paciente al momento del diagnóstico. Si se trata de una embarazada en el primer trimestre se recomienda un tratamiento quirúrgico radical es decir mastectomía con o sin reconstrucción inmediata y luego de finalizada la gestación se inicia quimioterapia y si es necesario radioterapia”, explica en diálogo con Télam-Confiar, Laura Ruíz Díaz, miembro titular de la Sociedad Argentina de Mastología.
Y continúa: “En el caso de una mujer en el último trimestre de embarazo se puede realizar una cirugía conservadora (preservar la mama) con o sin ganglio centinela o vaciamiento axilar de acuerdo al compromiso axilar. En caso de realizarse ganglio centinela debe utilizarse tecnecio 99 (sustancia para detectar cáncer) ya que el azul patente es tóxico para el feto”.
Sin embargo, enfatiza un concepto médico: se desaconseja la concepción durante la batalla terapéutica contra el cáncer. “No es recomendable un embarazo en esa situación, motivo por el cual debe utilizar métodos anticonceptivos durante su tratamiento contra el cáncer de mama. Es que una mujer que atraviesa una enfermedad oncológica sí puede concebir; de acuerdo al tratamiento que está recibiendo y a la edad, la fertilidad puede estar disminuida. Ciertas drogas oncológicas pueden afectar el ovario y hacer que la paciente quede en un estado de menopausia que puede ser transitorio o permanente”.
Ruiz Díaz es egresada de la Universidad Nacional del Nordeste (Corrientes), realizó sus residencias en el Hospital Dr. Ramón Madariaga de Posadas, Misiones, provincia donde reside. En 2016 obtuvo la certificación de experta en Radiología de la Mama, expedido por la Universidad de Barcelona y en la actualidad además del trabajo en consultorio, promueve la detección precoz desde la literatura, puesto que es la impulsora de La Letra Roa, un concurso de cuentos en los que invita a pacientes a compartir su experiencia. Escribir como una manera de sanar.
En la misma línea, Melisa Fischman, médica, especialista en clínica médica y oncología clínica en Centro Integral de Mastología (Cima) advierte: “En pacientes con un cáncer de mama localizado que están con un tratamiento activo (como por ejemplo quimioterapia, radioterapia, terapias target o inmunoterapia) se desaconseja el embarazo y deben usarse métodos anticonceptivos mientras realizan el tratamiento. Una vez finalizado su tratamiento y luego de ciertos controles (y tiempo), podrá planificar su embarazo”.
Y ante la consulta de cómo continuar si una paciente oncológica resulta embarazada también afirma que “depende del trimestre”. “Cuando el embarazo es muy precoz debe priorizarse la vida de la madre y esto debe ser discutido por un equipo multidisciplinario con un comité de ética y con la paciente, ya que es un tema muy delicado. A partir del segundo trimestre, puede realizar tratamiento con quimioterapia. En regla general, el tratamiento es similar al de la mujer no embarazada, los tiempos de cirugía se verán según el tipo de tumor y el mes de embarazo que lleve la mujer”.
Por otro lado, se refiere a la hormonoterapia para casos de pacientes con una enfermedad en estadíos tempranos. “Deben cumplir cinco a diez años de hormonoterapia, se aconseja realizar al menos unos años de tratamiento hormonal y luego junto a su médico planificar la suspensión para buscar el embarazo. Una vez finalizado el período de embarazo, retomar el tratamiento. Siempre es importante consultar estos casos con su oncólogo”, explica.
“La mayor parte de los diagnósticos de cáncer de mama que ocurren durante el embarazo, o poco después, se manifiestan por primera vez como un bulto indoloro en la mama. No obstante, la mayoría de los bultos detectados durante el embarazo no son cancerosos”, aclara Fischman.
Después de la enfermedad
Respecto a las pacientes que se recuperan de un cáncer de mama, las especialistas consultadas coinciden en la importancia de esperar un tiempo prudente una vez finalizado el tratamiento para buscar la maternidad.
“Lo recomendable es esperar dos años después de finalizar el tratamiento del cáncer de mama para una gestación”, señala Ruíz Díaz.
Por su parte, Fischman sostiene que “la espera para iniciar la búsqueda de un embarazo dependerá de cada caso en particular y es muy importante hablar esto con sus médicos tratantes”.