El presidente de Colombia, Gustavo Petro, aseguró este miércoles que presentará al Congreso un proyecto de reforma de los servicios públicos para, junto a las otras que ya se encuentran en trámite legislativo, alcanzar la paz y la justicia social en el país. Petro se dirigió a una multitud reunida en la Plaza de Bolívar, en el centro de Bogotá, acatando la convocatoria del gobierno para apoyar la defensa de la vida y las reformas, y conformada en su mayoría por indígenas, obreros y campesinos.
“Vamos a presentar la reforma a los servicios públicos de Colombia. Las leyes hoy vigentes que crearon los servicios públicos pusieron en un lugar privilegiado al empresario pero al usuario lo dejaron en la calle”, manifestó Petro. Según el mandatario colombiano, con el modelo actual “los usuarios no tienen derechos ante el servicio público” porque “las tarifas se colocan en virtud de la rentabilidad de unos cuanto empresarios”.
“El servicio público debe tener en el centro de su corazón al usuario” para asegurarle “a la población los mínimos vitales de luz eléctrica, agua potable y alcantarillado”, indicó Petro. Esa reforma se sumará a la de la salud “como un derecho universal”; la laboral, para que “en Colombia haya trabajo digno”; la educativa, “que busca que los jóvenes puedan entrar a la universidad”, y la de pensiones, para “que el viejito y la viejita puedan tener un plato de sopa y un bono pensional que les permita tener el afecto de su familia.
En ese punto el presidente citó a la cantante Shakira, de quien dijo que con “El jefe”, su nueva canción con el grupo Fuerza Regida, “dio en el clavo” al hablar de la explotación laboral. Petro, que fue constantemente aplaudido por unas 22 mil personas que, según la alcaldía, llegaron hasta la Plaza de Bolívar, dijo que este miércoles hubo movilizaciones de apoyo a su gobierno en “cerca de cien municipios” del país.
Fuerte respaldo popular
La multitud reunida en Bogotá animó constantemente al presidente al grito de “Petro, amigo, el pueblo está contigo”, especialmente cuando se refirió a la gente como base de su popularidad y cuando criticó a las encuestas que muestran lo contrario. “Ojalá otro gobierno progresista nos suceda para continuar la senda que vamos trazando y profundizarla”, dijo el mandatario, quien aseguró que no tiene la intención de perpetuarse en el poder porque no le gusta la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, a la que definió como “un palacio, frío, helado y feo”.
La llamada minga indígena fue llegando a la capital colombiana desde el lunes para participar en la manifestación y buscando establecer una mesa de diálogo con el gobierno en los próximos días. Sindicatos como la Confederación General del Trabajo y la Central Unitaria de Trabajadores, trabajadores, estudiantes y políticos del partido de gobierno, incluidos ministros y miembros del gabinete, se sumaron a la marcha para mostrar su apoyo a las reformas.