Boca Juniors cayó 1-0 este viernes en su visita ante Defensa y Justicia, por la cuarta fecha. Nicolás Fernández anotó el único tanto para los de Florencio Varela, que se afirman en zona de Copa Libertadores 2024

Primera victoria del Halcón como local ante el Xeneize, que lleva tres derrotas consecutivas y ya preocupa su presente en la Copa de la Liga.

De entrada, Boca sorprendió con su planteo a su anfitrión, muy acostumbrado a ejercer una presión asfixiante a partir de la mitad de cancha. El equipo de Jorge Almirón arrancaba desde su campo con un toqueteo que a priori parecía intrascendente, pero resultaba preciso porque hacía circular bien el balón por abajo; asimismo lograba el propósito de hacer venir a Defensa y así traspasar ese cerco tan característico que suelen plantar los de Vaccari en el mediocampo.

En ese trance, con Medina como cerebro y enganche, la visita llegó dos veces con riesgo y en ambas oportunidades la última puntada la dio Barco, que regresaba a la titularidad ya recuperado de una dolencia. 

En la primera, el lateral devenido delantero quiso habilitar a Cavani, pero justo se interpuso un defensor; en la segunda, remató incómodo de frente al arco tras una jugada brillante de Advíncula -otro defensor que ahora reviste como atacante- que incluyó una devolución sutil del uruguayo para el peruano, que no se animó a definir.

En eso, Medina recuperó e inició una contra furibunda en la que Cavani cedió para Barco y Ramos terminó ahogándole el grito al Colorado casi sobre la línea. Enseguida, Solari escapó por izquierda y su centro fue interceptado de media tijera por Togni, que la mandó muy cerca de un poste.

Luego, Javi García alternó buenas y malas: en una jugada salió jugando mal con el pie y Solari no pudo quebrarlo; en otra, se le escapó un balón por debajo del cuerpo y generó un corner. 

Para colmo, antes del descanso el local se agrandó ante las dudas de su ilustre rival: Barco fue atorado en una salida y Fernández casi factura; enseguida el mismo “Uvita” hizo temblar un poste, luego Rojo sacó en la línea un envío de Soto… Y entonces el nocaut maduró: contragolpe letal, habilitación de Togni y Fernández marcó la apertura ante un Boca que había arrancado bien, pero terminó muy desdibujado.

En el complemento siguió mucho mejor Defensa y Justicia, que parado de contra pudo liquidarlo en varias oportunidades y terminó haciéndole precio a Boca, que se fue desinflando. 

Almirón metió cambios (Barco salió por un feo corte de cinco centímetros en un pómulo), acumuló delanteros en el campo, pero no tuvo inventiva ni profundidad, y sumó así una nueva frustración en el certamen local, que lo tiene penúltimo en la Zona B.



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