El relanzamiento de la campaña de Unión por la Patria, que comenzó el sábado en Tucumán junto con los gobernadores peronistas y siguió el lunes en Plaza de Mayo con el anuncio sobre el Impuesto a las Ganancias junto a sindicalistas, tendrá su tercera escala este jueves, con un acto en el que Sergio Massa recibirá el apoyo de los movimientos sociales alineados con el oficialismo. La cita será en el microestadio Malvinas Argentinas, en el barrio porteño de La Paternal, y los anfitriones serán dirigentes y delegados de Somos Barrios de Pie, el Movimiento Evita y la Corriente Clasista y Combativa de todo el país, que aspiran a combatir en octubre el ausentismo registrado en las PASO, dejar atrás las internas con sectores que se enfrentaron en las primarias y militar cada voto de las barriadas populares “para cerrarle el paso a la derecha”.

Con ese objetivo, las organizaciones lanzaron la campaña “Barrio por barrio”, con la que apuntan a multiplicar la militancia “casa por casa hasta darla vuelta”, para revertir el resultado electoral de agosto.

“Estamos eligiendo la disolución nacional o la posibilidad de construir un futuro”, fue el diagnóstico que expresó el sábado Daniel Menéndez, coordinador de Barrios de Pie y funcionario del Ministerio de Desarrollo Social, en referencia a las alternativas que encarnan Javier Milei & Patricia Bullrich, por un lado, y Massa por el otro. Barrios de Pie, con la consigna “Massa presidente, liberalismo nunca más”, estuvo presente con su militancia en Tucumán.

Menéndez recordó que “el mundo del trabajo es heterogéneo”, celebró la rebaja del impuesto sobre el trabajo pero enfatizó que también hay “una agenda sobre los pibes que trabajan con plataformas, que requieren la posibilidad de acceder al ingreso por su trabajo con nuevas categorías como el monotributo tecnológico”, así como “una agenda de la economía popular, con el monotributo productivo, con el avance en la formalización y en el ingreso del salario social complementario atado al salario mínimo, una agenda que necesita que el Estado acompañe para ganar en productividad y para dar definitivamente una vuelta de página al asistencialismo y pasar a una Argentina del trabajo”. “Tenemos el enorme desafío de generar entusiasmo y expectativa en todo el conjunto para cerrarle el paso a la derecha”, destacó.

El Movimiento Evita lanzó seis días después de las PASO un documento titulado “Ni miedo ni desazón. A militar y construir la victoria”, en el que advirtió que “dos de los tres candidatos quieren conducir a nuestro país a una crisis profunda, comprometiendo la estabilidad institucional y económica”, y destacó la necesidad de generar consensos “para evitar saltos al vacío, y también la violencia social que solo puede llevarnos al caos”. El espacio que conducen Emilio Pérsico y Fernando Navarro fue uno de los grandes derrotados de las PASO: perdió en las siete intendencias bonaerenses en las que intentó dar batalla y sólo ganó en Moreno, donde ya gobierna de la mano de Mariel Fernández. El hombre de la barba blanca y el empresario gastronómico se ubicaron en primera fila en el acto de Tucumán.

El desafío de los movimientos sociales en esta etapa es fortalecer la campaña de Massa militando puerta por puerta en los distritos populares del conurbano bonaerense y de los cordones de las grandes ciudades, en busca de quienes no votaron en las primarias del 13 de agosto o bien se inclinaron por otros candidatos, desencantados con el rumbo del gobierno nacional.





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