Un video muestra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro liderando una reunión de gabinete en julio de 2002 en la que dice que ser jefe de Estado “es una cagada” y que estaba convencido de que le iban a hacer fraude ante Luiz Inácio Lula da Silva y que por eso había que trabajar poniendo en duda el sistema electoral entre la extrema derecha.
El video, divulgado este viernes en los medios brasileños, forma parte de las pruebas del Supremo Tribunal Federal contra la cúpula del Gobierno de Bolsonaro, acusada de preparar un golpe de Estado para evitar la victoria de Lula, poner en prisión a magistrados y utilizar a las Fuerzas Armadas como herramienta contra la legalidad.
“Sabemos que, si reaccionamos después de las elecciones, habrá caos en Brasil, se convertirá en una gran guerrilla, en una hoguera Brasil. Ahora, ¿Alguien tiene alguna duda de que la izquierda, tal como está, ganará? No, no sirve de nada si tengo el 80% de los votos. Ellos ganarán las elecciones“, afirma Bolsonaro en el video.
El trabajo audiovisual estaba en la computadora del exedecán Mauro Cid, quien fue detenido e hizo un acuerdo de delación premiada para reducir su pena por una serie de delitos de golpismo hasta alteración del certificado de vacunas de Bolsonaro y se conoce un día después del megaoperativo en el cual le confiscaron el pasaporte al líder ultraderechista, detuvieron a tres de sus exasesores y se allanaron las viviendas de generales retirados que fueron sus ministros.
El video fue filmado por el propio Gobierno como forma de divulgar en forma secreta entre funcionarios el plan de acción que se había trazado para diseminar fake news sobre el sistema electoral y generar caos en el país en caso de una victoria de Lula, quien tras asumir el 1 de enero de 2023 sufrió un intento de golpe bolsonarista el 8 de enero, una semana después.
“No podemos dejar que lleguen las elecciones y que pase lo que parece que va a pasar”, agrega el entonces presidente
De acuerdo con la Policía Federal, en esa hora de grabación queda claro “el arreglo de una dinámica golpista en el ámbito de la cúpula del Gobierno”.
La grabación muestra a un Bolsonaro por momentos fuera de sí, insultando a Lula y a jueces del Supremo Tribunal Federal como Alexandre de Moraes, Luis Barroso y Edson Fachin.
La investigación por la cual se confiscó el pasaporte de Bolsonaro por temor a que se escape del país la conduce Moraes, quien lleva desde hace cuatro años una megacausa contra el bolsonarismo por diversos delitos, entre ellos el golpismo.
“Todos aquí tienen una inteligencia por encima del promedio. Todos aquí, como todo el mundo ahí fuera, tiene algo que perder. No podemos dejar que lleguen las elecciones y que pase lo que parece que deberá pasar, tenemos que hacer algo antes”, asegura Bolsonaro en el video, rodeado de sus ministros.
En otro trecho, dice que para el sistema político su elección es una amenaza. “Mi cargo es una cagada, yo fui un diputado de mierda que nadie quería, que nadie le daba importancia”, aseguró el excapitán del Ejército, líder de la ultraderecha e inhabilitado electoralmente hasta 2030.
“Lo que está en juego es más grande que todos nosotros, es la mierda de la libertad. Más claro imposible. Vamos a tener que actuar”, se escucha decir a Bolsonaro en otro momento de la grabación, en la que también reprocha a sus ministros que no parecen querer “cambiar la situación”
Retiro de pasaporte
Este jueves, la Policía Federal de Brasil se presentó en la casa de Bolsonaro en el balneario de Angra dos Reis, en el estado de Río de Janeiro, y le retiró el pasaporte.
Por orden de la corte, la Policía Federal allanó 34 establecimientos en todo el país, procedimientos en los que fueron detenidos por golpismo ex asesores como Filipe Martins y el coronel Marcelo Camara, así como la del mayor de las Fuerzas Especiales del Ejército, Rafael Martins, en el marco de la operación ‘Tempus Veritatis’.
También fue detenido durante un allanamiento por portación ilegal de armas y tener pepitas de oro aparentemente extraidas ilegalmente el presidente del Partido Liberal, Valdemar Costa Neto.
Además de la detención de los militares, el círculo íntimo de poder del gobierno de Bolsonaro recibió allanamientos. Fueron objetivo los exministros de Defensa Walter Braga Netto y Paulo Sérgio Nogueira, y el exjefe del Gabinete de Seguridad Augusto Heleno Ribeiro.
Según la investigación, Bolsonaro participó de reuniones y dio indicaciones para conformar el borrador de una hoja de ruta para intervenir la justicia electoral con los militares y poner en prisión al juez Moraes.