Una auditoría interna dispuesta por el intendente de La Plata, Julio Alak, al asumir su mandato dejó en evidencia numerosas irregularidades violatorias de distintas leyes y delitos penales en la administración municipal, informó este sábado la comuna.
En un comunicado, el municipio precisó que tras una investigación los equipos técnicos de la actual gestión identificaron irregularidades como una persona fallecida que percibía salario como personal contratado, otras que cobraban sin presentarse a trabajar y personas detenidas que se encuentran cumpliendo condenas que recibían salarios.
“La investigación interna determinó numerosas irregularidades administrativas. En la misma se expone que había personas que cobraban sueldo y no trabajaban; como también agentes que cobraban sueldo sin tener legajo de personal, es decir que no habían cumplimentado los requisitos mínimos para su designación y sin embargo eran asalariados”, indicó el documento.
El texto precisó que entre las irregularidades también se pudo constatar liquidación de sueldos sin los legajos correspondientes, una persona fallecida a la que se le pagaba sueldo y un total de 13 personas detenidas por delitos graves en cárceles y alcaldías a las que se les seguía pagando la remuneración como si cumplieran servicios.
Respecto a estos últimos, indicaron en el documento que entre las mismas se encuentran homicidios agravados y en ocasión de robo; promoción y facilitación de la prostitución de niños y niñas; robo calificado por uso de armas de fuego; e incendios y estragos, entre otras.
El informe dejó en evidencia “cerca de un centenar de agentes municipales con condenas penales como homicidios dolosos, portación de armas de guerra o abuso sexual con acceso carnal a los que no se les requirió en el ingreso los certificados de reincidencia e informe policial como exige la normativa vigente”.
Del mismo modo, se comprobó que hubo exfuncionarios que cobraron durante varios años, aún con la vigencia del decreto del cese de funciones, indica el documento.
Además, se constataron 240 personas domiciliadas en otras ciudades, tales como Bahía Blanca, Rawson o incluso algunas localidades como Bariloche que “no asistían a trabajar”.
A su vez, los equipos técnicos pudieron identificar dos personas que se anoticiaron de tener un contrato municipal cuando fueron a hacer trámites en otros organismos, en tanto se están investigando esas contrataciones, que fueron en septiembre de 2023, indica el documento.
“Estas situaciones se dieron en el marco de un aumento de las designaciones que crecieron desmesuradamente en los años electorales” señalaron, en lo que representa una clara violación a la Ley de Responsabilidad Fiscal 13.295 y a la normativa provincial que regula el Empleo Público.
Al respecto, se informó que conforme a los datos que se desprenden del Plan de relevamiento integral al 10 de diciembre de 2023 la Comuna platense contaba con un total de 12.573 agentes.
En tanto, señalaron que al 2007, cuando terminó la cuarta gestión del intendente Julio Alak, en la ciudad vivían alrededor de 600 mil habitantes y la administración municipal contaba con 3.800 empleados.
Así, el crecimiento de designaciones generó que la Municipalidad pasara de 3.800 empleados en el 2007 a 12.573 en el 2023, es decir que aumentó más de un 300 por ciento en los últimos años cuando la población de la ciudad creció solo un 20 por ciento.
De esta manera, “en términos comparativos, La Plata tiene más empleados designados que distritos como La Matanza, el más grande de la provincia, donde residen 1.837.774 personas y se registran 7.426 municipales, de los cuales 3.112 son personal de salud de los hospitales comunales y 4.314 de planta”.
En este contexto, señaló que la capital bonaerense tiene un 70% más de empleados que La Matanza con casi la mitad de la población y sin contar con hospitales municipales, mientras que La Plata cuenta con un empleado municipal cada 61 habitantes y La Matanza tiene un empleado cada 247 habitantes