El Gobierno redujo en forma significativa la cantidad de vehículos cero kilómetro que pagarán el impuesto a los autos de lujo. Lo hizo al elevar los montos de las unidades a partir de los cuales empieza a regir el tributo. La base imponible para la primera escala, que hasta ahora estaba en 10.364.800 pesos, pasó a 19.826.151 y pagará una alícuota de 20 por ciento, mientras que la segunda escala subió de 19.135.000 a 36,602.126 pesos, con una alícuota de 35 por ciento.
La medida también modificó los valores que se aplican para el impuesto en las motos. Quedaron eximidas las unidades cuyo precio de salida de fábrica sea de 5.324.000 pesos, en tanto que se gravarán con un 20 por ciento las operaciones cuyo valor sea igual o superior a ese monto, y con un 35 por ciento las de 6.826.234 pesos o más.
La medida se dispuso a través del decreto 84/2024 publicado en el Boletín Oficial, ante “la magnitud del reordenamiento que experimentaron las principales variables macroeconómicas y el cambio en los precios relativos”, que tornó necesario “realizar, transitoriamente, ciertas adecuaciones a los valores establecidos”, se indicó en los considerandos de la norma.
El decreto establece además la modificación del sistema de actualización de la base mínima imponible, que seguirá siendo trimestral, pero entrará en vigencia en el mes consecutivo a la publicación del Indice de Precios al Consumidor, adelantándose un mes su aplicación para evitar desfasajes entre la inflación y los precios alcanzados por el impuesto interno.
La medida, se indica en sus considerandos, “permite atender la situación económica de los sectores de que se trata e intenta adecuar las condiciones de mercado al nuevo esquema de costos de producción involucrados y los precios relativos de la economía, evitando posibles consecuencias en términos de caída de la producción y del empleo”.
Este impuesto, habitualmente aplicado a vehículos de alta gama, había sido objeto de reclamos por parte de empresas y cámaras del sector, ya que luego del ajuste en el dólar oficial del 13 de diciembre, pasó a abarcar modelos más económicos. Al respecto, la subsecretaria de Política Industrial, Daniela Ramos, manifestó que “es una medida muy esperada por las automotrices y concesionarias”. Las ventas de vehículos 0 Km en lo que va de enero registran una caída de casi el 50 por ciento interanual.