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“Vacaciones, ¡cambiá de aire!”

En estas épocas veraniegas hay como una obsesión con las vacaciones, un mandato social que dice que te tenés que ir a algún lado sí o sí. En mi caso, como viene la mano, no me subo a un omicrón de larga distancia ni mamado.

El problema, para mi, es que las vacaciones están mal planteadas.

Está bien el concepto de descansar, pero está mal el concepto vacacional. Explico: las vacaciones que dan las empresas a los trabajadores. Cuantos más años llevás en la empresa, más días de vacaciones te corresponden. ¡Tendría que ser al revés!

El primer año, que es el que te gastan los compañeros, te hacen pagar derecho de piso y te hacen servirle café hasta a la persona encargada de servirte el café a vos… ese año, te tienen que dar más vacaciones que en ningún otro año. Digamos que te corresponden unos… tres meses y medio. Y de ahí en adelante la cantidad va decreciendo, total, ya estás podrido de ir siempre a la misma playa, los chicos están grandes, se fueron de casa y para aburrirte, por lo menos laburás un rato.

Eso si trabajás en relación de dependencia. Si sos autónomo, monotributista o velocirappi las vacaciones te las tenés que bancar vos. Y ahí el gobierno debería tener un plan Post-Viaje. Vos te vas de vacaciones de acuerdo a tu categoría de monotributista, por ejemplo: La categoría más baja, más tiempo de vacaciones, y la más alta, menos. ¿Por qué? Obvio: porque el de la categoría más alta la pasa mejor en la vida.

Y cuando volvés, le pasás la cuenta al Estado. ¿O no son un derecho universal las vacaciones? ¿Por qué solo se las pagan a los que están en relación de dependencia? Los autónomos tienen mucha más dependencia que los que trabajan en relación de dependencia. Y además, ¿el slogan no era “liberación o dependencia”? Pues bien: los autónomos queremos la liberación de la dependencia de no poder juntar la guita que nos ayude a ir de vacaciones sin depender de nadie.

Y no dudo de la importancia de descansar, reitero, pero cuando me dicen “las vacaciones son importantes para cambiar de aire”, no puedo menos que pensar: ¿Qué somos? ¿Cubiertas de un auto, que hay que cambiarnos el aire? Y suponete que vas y cambiás el aire, ¿a cuánto te lo cambian? ¿al oficial o al blue?

Otro concepto vacacional que no me cierra: Se supone que uno se va de vacaciones para salir de la rutina, ¿verdad? Entonces, cuando uno está de vacaciones, ¿por qué tiene que pagar por las cosas, que es lo que hace todos los santos días de su vida? Una verdadera vacación sería: te sentás en el mejor restaurante, pedís lo más caro, morfás como un cerdo y cuando viene la cuenta, le decís al mozo: “Ah, no. Disculpe, estoy de vacaciones”.

Siguiendo con ese criterio de salir de la rutina: ¿Por qué tenés que pasarlas con tu familia? Si es lo que hacés todos los santos días de tu vida. ¡Que se arregle tu familia, y que se vaya de vacaciones con otra familia, con otra pareja, con otros hijos, otros suegros, ¡y hasta con otros perros! Eso serían vacaciones.

En cambio, en las vacaciones tradicionales, uno sigue rodeado de la misma gente, discutiendo todos los días de lo mismo pero en un ambiente más pequeño donde el cambio de aire pasa más inadvertido que el hombre invisible escondido detrás de una sequoia gigante. Y ni hablar si te llueven un par de días seguidos. Vas a extrañar la fase 1 como pocas veces. 

También puede suceder lo contrario: que logres enganchar un lugar más espacioso que tu propio hogar y que el problema no sean las vacaciones, sino el resto del año. Y ahí te preguntarás: ¿para qué me fui de vacaciones? ¿Quién me mandó a cambiar el aire?

Las vacaciones según pasan los años

Ojo: todo es relativo a la edad y la situación familiar. Cuando sos adolescente no importa la incomodidad. Solo importa que te hayan dado dinero suficiente, una buena conexión a internet para pasar las noches conectado y estar lo más lejos posible de tus padres.

Entre los 25 y 35 años, si todavía vivís con tus padres, los que quieren estar lejos de vos son tus padres.

Cuando se trata de una pareja con chicos, la cosa cambia. Tenés distintas opciones: un lugar con amplias playas, siempre y cuando estés en estado físico como para correr a los críos cuando se escapan, o el campo o la sierra, un lugar donde tenés que llevar todo tipo de cremas y lociones para las picaduras de mosquitos, jejenes y terraplanistas perdidos por no hacerle caso al gps.

Ya de mayor, no es tan importante el destino. Lo importante es que haya un restorán o un boliche que abra entre las 19.30 y las 20 para poder cenar y estar de vuelta en casa a las 21, en la cama, viendo tele.

Por último, los vagos que no laburan, los herederos de ricachones que se la pasan de reposera en reposera, esos tendrían que laburar mientras vos estás de vacaciones. Aunque no sé si no sería preferible que no lo hagan porque… son capaces de hacer mucho daño en poco tiempo.

En fin… Que es época de vacaciones y ojalá que todos, de la forma que sea, de la forma que quieran, de la forma que puedan, la pasen lo mejor posible…. sea lo que sea que eso signifique…





Fuente Telam