El célebre escritor francés Michel Houellebecq cuestionó, en el marco de una entrevista con un medio israelí, la “reacción antisemita” en Europa después de los atentados del movimiento islamista palestino Hamas del 7 de octubre: “Esperaba un gran movimiento de simpatía y solidaridad hacia los judíos, ocurrió todo lo contrario. Han pasado dos meses y todavía no lo puedo creer”.
La entrevista a Houellebecq apareció publicada por primera vez en el suplemento de cultura y literatura que todas las semanas publica el periódico israeli Yedioth Ahronoth y ahora genera un enorme revuelo en Europa.
El autor francés, durante la charla, dijo no comprender el origen del antisemitismo: “El racismo es fácil de entender. Ves a un negro y te dices: no me gustan los negros. Ves a un blanco y te dices: no me gustan los blancos. Es básico, animal, inmediato. El antisemitismo es más extraño”.
Además, defendió la respuesta militar de Israel. Según él, los israelíes son especialistas en ataques selectivos, pero en la Franja de Gaza es extraordinariamente difícil llevarlos a cabo, en la admisión tanto de que hay muchas víctimas inocentes como de que no ve cómo podrían hacer otra cosa: “Para mí, están haciendo (los israelíes) lo que es necesario”.
El autor cuestionó la actitud “actitud woke”, que a él le genera “miedo y repugnancia”, detrás de cierta defensa europea de la causa de Hamas. “Deben ser castigados con la suficiente dureza. Siento decirlo tan brutalmente, pero la base de la guerra es la relación de fuerzas”, consideró en la entrevista a Yedioth Ahronoth.
No es la primera vez que el autor se posiciona frente a esta cuestión. Hace un mes, en diálogo con la radio pública israelí, el autor de “Sumisión” se mostró confiado sobre el triunfo de Israel: “Las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) siempre han ganado y volverán a ganar esta vez”, dijo con certeza, remontándose a guerras pasadas.
“La gente que cree que puede eliminar a Israel debe saber que se equivoca y no lo conseguirá, tienen que persuadirse de que no pueden eliminar a Israel. Parece que varios países árabes lo han comprendido pero todos tienen que entenderlo: Israel está acá y así permanecerá”, sostuvo.
El autor, que desde hace una década suena todos los años como posible candidato al Nobel de Literatura, saltó a la fama con su primera ficción, “Ampliación del campo de batalla” (1996), donde esboza una teoría sobre la guerra de los sexos en la sociedad actual; y se afianzó con “Las partículas elementales” (1998), una crítica a la contracultura de los ’60; así como “Plataforma” (2001), donde narra las relaciones entre las relaciones entre la civilización occidental y el Tercer Mundo.