Un Tribunal de Impugnación resolvió, por unanimidad, que el maestro acusado de 24 abusos en un jardín de infantes de la ciudad de Neuquén sea juzgado por un jurado popular por los tres hechos en los que hay prueba directa, es decir, aquellos en los que las víctimas dieron testimonio en cámara Gesell y elevarán la causa a juicio oral.
“Según establece el Código Procesal Penal, nadie puede ser llevado a juicio sólo con prueba indirecta; la prueba indirecta sólo puede ser utilizada en un juicio para corroborar o dar credibilidad al testimonio de la víctima o de un testigo directo de un hecho, por lo cual todos aquellos casos en los que no se pudo contar con una declaración de las víctimas o de un testigo directo de los abusos, no podrán ser elevadas a juicio por el momento”, señalaron desde el Poder Judicial a través de un comunicado.
Por otra parte, contrario al pedido de la defensa del docente Walter Herrera, el Tribunal no dictó el sobreseimiento por los restantes casos en los que no se cuenta con prueba directa: “Al ser una causa declarada compleja, el plazo de investigación con las correspondientes prórrogas puede extenderse por tres años, en los cuales tanto la Fiscalía como las querellas pueden lograr alguna nueva declaración”, indicaron en el escrito.
En tanto, el fiscal jefe Maximiliano Breide Obeid dijo que impugnará la decisión ante la sala penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), y los representantes legales de las familias harán lo mismo.
El Tribunal de Impugnación, integrado por Federico Sommer, Richard Trincheri y Florencia Martini, resolvió elevar la causa a juicio por jurado popular imputando al docente por dos hechos de abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por ser responsable de la educación de las víctimas, y por un caso de abuso sexual simple, también agravado por ser responsable de la educación de la víctima.
La pena que establece el Código Penal por cada uno de los primeros hechos puede ir desde los 8 a los 20 años de prisión y por el último hecho es de 3 a 10 años de prisión.
Según la teoría del caso impulsada por el fiscal, el docente imputado, entre marzo y julio de 2022, aprovechó su condición de encargado de la educación de niños y niñas durante el dictado de la clase de música y cometió los abusos en un jardín de infantes de la ciudad de Neuquén.
El acusado “enmascaraba” la situación como juegos inofensivos, y les pedía a los niños y a las niñas mantener el secreto.
El 6 de julio de 2022 la Fiscalía le formuló cargos por 16 hechos y luego, con el avance de la investigación, amplió la acusación.
Con la etapa de juicio abierta, la discusión ante el jurado popular iba a ser en torno a 24 hechos independientes en concurso real: 20 abusos sexuales simples, dos con acceso carnal y dos gravemente ultrajantes, en todos los casos agravados por la calidad de educador del imputado.
El acusado permanece detenido con prisión preventiva desde el momento de la formulación de cargos.