El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se reunirá el jueves con su par guyanés, Irfaan Ali, en San Vicente y las Granadinas para discutir “asuntos relacionados a la controversia fronteriza” por el Esequibo, un territorio rico en petróleo que enfrenta a ambos países, informó la nación anfitriona.
“Ambos han acordado que dicha reunión se celebre bajo los auspicios de la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe) y el CARICOM”, la Comunidad del Caribe, indicó el texto firmado por el primer ministro Ralph Gonsalves, que apuntó que el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, también fue invitado al encuentro.
La reunión fue confirmada además por la Cancillería venezolana, que dijo que fue acordada tras las conversaciones mantenidas por Maduro con Lula y Gonsalves, en las que hablaron sobre el objetivo de “mantener América Latina y el Caribe como una zona de paz, sin interferencia de actores externos”.
“Venezuela expresa su satisfacción y asume dicha convocatoria con beneplácito y compromiso”, indicó el texto, en el que se informó además que Maduro habló también con el secretario general de la ONU, António Guterres.
Después de que el presidente venezolano firmara a última hora del viernes los seis decretos que representan un plan de incorporación del Esequibo al mapa político de Venezuela, Lula lo instó a no tomar “medidas unilaterales”.
“Lula enfatizó la importancia de evitar medidas unilaterales que podrían agravar la situación” en la disputada regió, indicó la Presidencia brasileña en un comunicado emitido luego de la conversación telefónica entre ambos líderes.
Venezuela aprobó el domingo mediante un plebiscito la anexión del Esequibo, una zona rica en petróleo de cerca de 160.000 kilómetros cuadrados que Caracas reclama desde 1844, sin haber tenido nunca posesión de ella.
Unos días más tarde, el presidente de Venezuela presentó ante la Asamblea Nacional (Parlamento) una Ley Orgánica para la creación del estado de Guayana Esequiba tras los resultados del referendo, no reconocido por Guyana, pero que para Caracas tuvo carácter vinculante.
En ese marco, el presidente de Guyana instó a Maduro a respetar el derecho internacional y a evitar cualquier posible “paso en falso”, al advertir además de que las Fuerzas Armadas guyanesas están ya en “máxima alerta” y, a nivel político, hay contactos tanto con la ONU como con Estados Unidos.
El primero de los decretos firmado por Maduro designa oficialmente al mayor general Alexis Rodríguez Cabello, un militar de 58 años, como la “autoridad única” del Esequibo.
El general, actualmente diputado, ya había sido designado en ese puesto de manera provisional durante esta semana.
El segundo decreto crea “una Alta Comisión Nacional para la defensa y recuperación” del territorio, encabezada por la vicepresidenta del país, Delcy Rodríguez, según el comunicado recogido por la cadena oficial de televisión VTV.
La sede político-administrativa de esta “autoridad única” se encontrará en Tumeremo, en el este del país y junto a la frontera con Guyana, avanzó el Gobierno venezolano el pasado miércoles.
El tercer decreto presenta un nuevo mapa de Venezuela que incorpora efectivamente el territorio: “Hay que llevarlo a escuelas, liceos, en un lugar especial del hogar”, advirtió Maduro durante su presentación.
El cuarto anuncia la creación inmediata de la división para el Esequibo de la petrolera estatal venezolana, PVDSA, y el quinto se refiere a la creación de una “zona de defensa” para el territorio, la llamada Zona de Defensa Integral la Guayana Esequiba (ZODI).
“Un tema clave, han destruido el ambiente, toda la biodiversidad, la belleza y tenemos que recuperarla”, aseveró Maduro.
El sexto decreto, relacionado con el anterior, da por iniciada “la declaración de los nuevos parques nacionales, Zona Protectora de Defensa y monumentos naturales de la Guayana Esequiba”, consignó la agencia de noticias Europa Press.
Esta presentación del Gobierno de Venezuela se realizó poco antes que el Consejo de Seguridad de la ONU finalizara sin declaraciones públicas su reunión con carácter “urgente” por la controversia entre Venezuela y Guyana.
La sesión se realizó a pedido de Guyana, al argumentar que las últimas medidas adoptadas por Caracas “amenazan la paz y la seguridad internacionales”, que son competencia de esta instancia de Naciones Unidas.
La disputa entre los países vecinos no causó problemas entre ambos países ni para el resto de la región hasta 2015, cuando se descubrió un gigantesco yacimiento de petróleo -considerado la segunda mayor reserva mundial- en una zona del océano Atlántico correspondiente al área en cuestión.
Tras el fracaso de varias iniciativas para resolverlo, Guyana llevó en 2020 el caso a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de la ONU, que en un fallo reciente pidió “abstenerse de cualquier acción que modifique la situación actualmente vigente en el territorio en disputa”, pero Venezuela reiteró que no reconoce la competencia de ese tribunal.
En ese contexto, las autoridades venezolanas convocaron un referendo el domingo pasado para la anexión de Esequibo, y el Parlamento venezolano aprobó un proyecto de ley destinado a crear allí una provincia.
En medio de las tensiones, el Gobierno de Venezuela acusó a Guyana de haber dado “luz verde” para la instalación de bases militares estadounidenses en la región en disputa, el mismo día en que un helicóptero militar de Guyana con siete personas a bordo desapareció cerca de la frontera con Venezuela, aunque las autoridades guyanesas lo atribuyeron a “las condiciones climáticas adversas”.
El conflicto territorial se remonta al siglo XIX, cuando un fallo de 1899, defendido desde Guyana, estipulaba que Venezuela renunciaba al Esequibo, aunque más tarde se retractó de ello.
Caracas, por su parte, se apoya en el Acuerdo de Ginebra de 1966 firmado entre el Reino Unido -antigua potencia colonial de Guyana- y Venezuela, en el que reconocían al Esequibo como un territorio en disputa.