¿Qué significa para usted ser guía, especialmente en este momento de su carrera?
Es una enorme inyección de confianza, pero también una enorme responsabilidad. Tendré que saber transmitir mis habilidades y conocimientos a la próxima generación de diseñadores londinenses y a las personas que quieran entrar en este sector, uno de los más difíciles de triunfar.
Cuando pienso en cómo llegué aquí, me doy cuenta de que no hay una sola manera de hacer las cosas, aunque creo que tengo una perspectiva única. Aprendí de mis errores y eso me convirtió en un diseñador más fuerte. Hice unas trece temporadas en unos pocos años. Mi experiencia es algo que pueden aprovechar. A veces es bueno reflexionar. Mirando hacia atrás y aprendiendo de tu propia experiencia de estudio también, yo también estoy aprendiendo. Estoy comprometido a contribuir con los estudiantes.
¿Qué habilidades esenciales crees que los estudiantes deben desarrollar como futuros diseñadores?
Es fundamental desarrollar lo que tienes que decir. Tu propia voz. Necesitas tener tu propia autenticidad y tu propia historia, y tus propios medios para explorarla. ¿Con quién estás hablando? ¿A quién te diriges? Esto es lo que hay que consolidar en estos centros dedicados a la creatividad.
¿Qué consejo le darías a alguien que empieza una carrera como diseñador?
Acumular la mayor experiencia posible, porque existen diferentes formas de trabajar. Experimente tantos entornos de trabajo como sea posible y conozca a tantas personas como pueda. Creo que hice bien esta parte de mi viaje. Es realmente importante involucrarse en la diversidad, tanto en las grandes empresas como en las más pequeñas y más íntimas. Sobre todo: no apresures el proceso. No hay límites de edad ni prisas, puede que sea joven, pero no hay barrera desde este punto de vista. Todo es cuestión de tiempo.
¿Has tenido un mentor en tu carrera?
Muchos de mis tutores de pregrado y posgrado se han convertido en mis maestros. Andrés Ibi fue un guía. Durante mi maestría, David Kappo de Central Saint Martins, por ejemplo, me enseñó a no estar constantemente absorto en mi trabajo y a dar un paso atrás cuando fuera necesario. La moda tiene un ritmo vertiginoso y hay que saber calibrarse. Siempre he sido una persona a la que le encanta escuchar.
qué hace un buen maestro?
Creo en la honestidad. La honestidad es un buen maestro, al igual que dar espacio. Lo que hagas debe llegarte espontáneamente. Los mentores deben dar consejos y dejar espacio, ofreciendo una variedad de opciones que, a su vez, pueden dar vida a la inspiración.
Como decíamos, la moda puede ser una industria difícil de gestionar. ¿Qué consejo le darías a alguien nuevo en este mundo?
Mi consejo es intentar implicar siempre. “Atraer” significa encontrar a su audiencia. Tienes que encontrar tu audiencia. Es importante tener intereses fuera de la moda, porque eso es lo que te convierte en una voz interesante para escuchar; de lo contrario, no podrás crecer. Finalmente, en un sector tan elitista, es necesario tener confianza en uno mismo para abrirse camino.
Creo que Internet es un gran peligro para la industria. El peligro es la homogeneización y, muchas veces, gente que viene del mundo de internet acaba alineándose. Nunca debes conformarte, debes encontrar tu propia voz. Habla con la multitud que se mueve contigo y te apoya.
¿Cómo te describirías como profesor?
Sólo digo lo que me viene a la cabeza, como siempre lo he hecho en mi vida.
Artículo publicado originalmente en GQ Reino Unido