Los restos de María Clara Urdangaray, la joven platense que murió al caer de un balcón de la ciudad de Pristina, en Kosovo, en un presunto femicidio por el que está detenido su novio suizo, fueron repatriados y serán velados este miércoles por su familia y amigos.
Según confirmó Magdalena Delmonte, mamá de la joven, en redes sociales, el cuerpo llegó a Ezeiza y fue trasladado a la ciudad de La Plata para ser velado en una casa de sepelios de la localidad de Villa Elisa y el jueves inhumado en el cementerio local.
María Clara Urdangaray había viajado a la ciudad de Barcelona, España, en noviembre del año pasado y unos meses después conoció al imputado, Endrit Nika (31), en una fiesta.
Ambos se fueron a vivir a juntos a Suiza y el último fin de semana de julio, viajaron a la ciudad de Pristina, en Kosovo, con el fin de participar de la fiesta de casamiento del hermano del imputado, según pudieron establecer los familiares de María Clara.
Finalmente, el 1 de agosto, mientras permanecían en esa ciudad, la joven murió al caer desde un balcón del sexto piso del edificio en el que se alojaban, hecho por el cual fue detenido su pareja, quien quedó acusado del femicidio, según dijeron las fuentes.
Desde el entorno de la familia de la víctima informaron que Nika seguirá detenido hasta el 1 de noviembre, ya que el fiscal del caso pidió la prórroga de la detención.
“Sabemos que hay elementos probatorios para que continúa detenido hasta el juicio”, dijeron los informantes consultados.
A los pocos días de conocerse la noticia del femicidio de la joven, su familia había lanzado una colecta solidaria para afrontar los costos de la repatriación del cuerpo, aunque el gobierno de Kosovo ofreció colaborar con parte de los gastos de traslado, ante lo cual la mamá de Urdangaray publicó un posteo en Facebook para dar de baja las donaciones.
En esa publicación, la mamá de Clara escribió un mensaje para agradecer “todo el cariño” recibido.
“Es importante mencionar la fuerza que nos han dado con tantas palabras hermosas que nos fueron transmitiendo sus amigos/as/es, recordándola con tanto amor. Eso da mucha fuerza y paz. Ella era todo eso que estaba bien, dulce, compañera, siempre con una palabra justa sin lastimar a nadie, brillaba con su presencia y su luz era inmensa, así la recuerdan quienes formaron parte de su vida y no saben lo bien que nos hace escuchar eso”, expresó.
Por último, pidió “justicia por Clarita” y escribió: “Que Endrit Nika ‘femicida’ tenga una condena ejemplificadora y que nunca más haga daño. Nadie tiene derecho a quitarle la vida a ningún ser humano. ¡Asesinaste cruelmente a nuestra hija y no tenes perdón, ni olvido!”.