Boca Juniors, finalista de la Copa Libertadores y de andar titubeante en la Copa de la Liga, se enfocará este domingo en otro de sus objetivos, la Copa Argentina, cuando enfrente por los cuartos de final a Talleres de Córdoba, uno de los equipos de mejor rendimiento durante el año, en un partido a jugarse en Mendoza. El encuentro se jugará desde las 21.10 en el estadio Malvinas Argentinas, en Mendoza, será arbitrado por Fernando Echenique y televisado por TyC Sports. 

La Copa Argentina ya definió durante la última semana a tres de sus semifinalistas: San Lorenzo, Defensa y Justicia y Estudiantes de La Plata. Una de las semifinales la protagonizarán San Lorenzo y Defensa y Justicia, y la otra será entre el Pincha y el vencedor del cruce entre Boca y Talleres.

En el caso de Boca, el más ganador de la Copa Argentina con títulos obtenidos en 1969, 2012, 2015 y 2020, se instaló en los cuartos de final tras haber dejado en el camino a Olimpo de Bahía Blanca, Barracas Central y Almagro. Talleres, por su parte, eliminó sucesivamente a Chacarita Juniors, River Plate y Colón de Santa Fe, y desea instalarse nuevamente en la definición del torneo luego de haber perdido el año pasado la final ante Patronato, descendido a la Primera Nacional.

Si bien el gran objetivo de los Xeneizes en el semestre es la obtención de la Copa Libertadores, en la final que jugará ante Fluminense, de Brasil, el próximo 4 de noviembre en el estadio Maracaná, en Río de Janeiro, la Copa Argentina también es un desafío a conquistar. 

En ese contexto, las malas campañas de Boca en los dos torneos domésticos de la temporada, la Liga Profesional y la actual Copa de la Liga en la que perdió cinco partidos de los ocho que jugó, lo están dejando afuera de la clasificación para la Libertadores del año próximo. Es decir que para poder jugar la Libertadores 2024 Boca necesita coronarse campeón el 4 de noviembre ante “Flu” o bien ganar la Copa Argentina que otorgará un cupo a la próxima Libertadores. 

Por esa razón, el DT Jorge Almirón pondrá en Mendoza todo su potencial, sin guardarse nada, para ir en busca de las semifinales y también para no repetir la muy foja actuación del martes último ante otro equipo cordobés, Belgrano, con el que perdió 4-3 por la Copa de la Liga con una formación que incluyó suplentes de bajo nivel.

En ese contexto, Boca tendrá a su gran figura del semestre, el arquero Sergio “Chiquito” Romero, a la dupla central Nicolás Figal-Marcos Rojo, a Guillermo “Pol” Fernández en el mediocampo y en la delantera al goleador uruguayo Edinson Cavani, junto a su compatriota Miguel Merentiel.

Los ausentes serán el peruano Luis Advíncula y el colombiano Frank Fabra, ambos citados por sus seleccionados para la doble fecha de Eliminatorias Sudamericanas, y tampoco estará Norberto Briasco, convocado por Armenia, aunque en su caso se trata de un suplente que juega muy de vez en cuando.

La incógnita que tenía Almirón estaba en el lateral izquierdo, ya que sin Fabra, su reemplazante natural es el uruguayo Marcelo Saracchi, pero estuvo toda la semana a maltraer una contractura y entrenó diferenciado, aunque finalmente jugará el partido.

Por el lado de Talleres, la doble fecha de Eliminatorias le quitó a dos piezas claves: el defensor Matías Catalán y el delantero Ramón Sosa, con los seleccionados de Chile y Paraguay, respectivamente. El juvenil Matías Galarza también está con el seleccionado guaraní aunque en Talleres generalmente es suplente.

Con ese panorama, en lugar de Sosa, el entrenador Javier Gandolfi probó durante la semana al colombiano Luis Miguel Angulo y al chileno Bruno Barticciotto, aunque finalmente parece que regresará Nahuel Bustos, la principal figura de los cordobeses en ofensiva que estaba jugando muy poco debido a que sufrió un desgarro en el inicio de la Copa de la Liga y tardó mucho en recuperarse. En la defensa por Catalán ingresará otro colombiano, Kevin Mantilla, para acompañar a Lucas Suárez.

El partido se plantea como una confrontación de estilos disímiles, con Talleres y un fútbol vertical, veloz, y Boca con mayor tenencia de la pelota, más contragolpeador y con jugadores de mayor jerarquía que pueden definir un partido en un par de jugadas.



Fuente-Página/12