Desde los incendios que devastaron la isla hawaiana de Maui el pasado mes de agosto, Dwayne Johnson ha sido una de las personalidades más movilizadas para ayudar a las víctimas. En particular, el peso pesado de Hollywood creó un fondo de apoyo con Oprah Winfrey tras la catástrofe, instando al público a donar después de haber pagado ambas 5 millones de dólares. Sumas importantes, pero que a algunos les parecieron muy modestas en comparación con la inmensa fortuna de las dos personalidades.
El actor estuvo el año pasado entre los mejor pagados de la profesión con unos ingresos anuales de 270 millones de dólares, para una fortuna total estimada en unos 800 millones de dólares, según Forbes. Por su parte, Oprah Winfrey, aunque estuvo a punto de entrar en el club de los 400 multimillonarios estadounidenses, su fortuna se estima en 2.800 millones de dólares.
Más de un mes después de la reacción violenta, Dwayne Johnson finalmente decidió enmendarse en un largo mensaje de video publicado en Instagram.
Déso
“Debería haberlo hecho mejor y la próxima vez lo haré mejor”, afirmó Dwayne Johnson, precisando de paso que nunca antes había lanzado un fondo. “Sé que el dinero no cae del cielo y que muchas personas tienen dificultades para llegar a fin de mes. Entiendo y sé lo que es. Lo último que quieres cuando estás en esta situación es que alguien te pida dinero, especialmente cuando esa persona ya tiene mucho dinero. »
Sin embargo, la estrella del cine de acción tuvo cuidado de no anunciar una donación adicional por su parte, prefiriendo aplaudir los resultados de su fondo de apoyo, que según él paga hasta 1.200 dólares al mes a “miles y miles de supervivientes”.
En cualquier caso, recordamos que, al igual que en Francia, los contribuyentes estadounidenses tienen la posibilidad de deducir de sus impuestos parte de sus donaciones, hasta el 60% de su valor. Un sistema que, por una vez, beneficia principalmente a los más ricos.